¿Cuán genuina fue la demostración de emoción de John Boehner el 2/11/2010?

Genuino. No creo que ninguna de estas personas en la cima sea tan egoísta que piensen que podrían engañarnos con voces falsas y temblorosas. Creo que las lágrimas de Hillary hace un año y medio fueron igual de reales. Él cree en su agenda y sabe que hay mucho en juego. Y personalmente, él no estaba “a la manera nacida”; nadie le dijo que, cuando tenía 18 años, algún día serás el segundo en la fila de la Presidencia de los Estados Unidos de América. Contraste con Nancy Pelosi, cuyo padre era un congresista de Maryland, o George Bush o Al Gore.

En cualquier caso, no creo que hayamos llegado al punto en que los hombres de sesenta años obtengan puntos adicionales por desmoronarse, aunque sea un poco. Lea sobre Edmund Muskie en 1968: puede que haya llorado o no, y le ha costado la Presidencia. Eso fue hace mucho tiempo, y las cosas han cambiado mucho, pero aún hoy no es una muestra de fortaleza.

Es realmente una pregunta que uno puede responder. A menos que lo conozcas personalmente.