Voy a definir una “democracia directa” como aquella en la que no hay rama legislativa: la gente cumple esa función. Creo que una sociedad en la que la democracia directa podría ser efectiva tendría al menos cuatro características principales:
- Estaría limitado en el tamaño de la población: una aldea o pueblo pequeño, donde la población posiblemente pueda reunirse y debatir. Creo que es posible tener una población más grande que pueda debatir y votar electrónicamente, y eso podría funcionar, pero no tan bien como lo haría la gente en la que interactuaban personalmente.
- Aunque la gente básicamente se haría cargo de la función del poder legislativo, aún sería necesario que un ejecutivo desempeñara el gobierno diario y ejecutara fielmente las leyes. Aún sería necesario una Constitución para establecer las reglas y directrices por las cuales funcionaría la democracia directa. Aún sería necesario un poder judicial independiente para arbitrar. Y aún sería necesario que hubiera controles, equilibrios y protecciones para las minorías.
- La gente necesitaría estar muy bien educada. La educación universal de alta calidad debería ser aplicada y garantizada por el gobierno, y no solo hasta el grado 12, sino al menos hasta el nivel de una licenciatura. Además, se les debe enseñar a pensar críticamente, comprender las reglas de la evidencia, la lógica, cómo evitar el Pensamiento grupal, la intolerancia y sacar conclusiones precipitadas. Toda la sociedad debe VALORAR el debate, la evidencia, la lógica y no estar bajo el dominio del pensamiento místico, y no quiero decir que los pensamientos se impongan y codifiquen en la medida en que se le permita pensar, sino que nosotros, como sociedad, lo haríamos. necesitan tener el hábito de esperar evidencia de grandes reclamos y descartar malas ideas que no están respaldadas por evidencia.
- La gente debe poder estar de acuerdo en no estar de acuerdo, pero aún aceptarse mutuamente como conciudadanos en lugar de descartarlos como el enemigo si no están de acuerdo políticamente. Deben ser capaces de acordar una identidad nacional y una visión común de buscar el bienestar a largo plazo de la nación en su conjunto, incluso si no están de acuerdo con las mejores formas de llegar allí.