El estado-nación llegó a arraigarse firmemente cuando la humanidad entró en el siglo XX. Se identificó con sus cuatro elementos esenciales: Población, Territorio, Gobierno y Soberanía. En el ámbito de las relaciones internacionales, sus cuatro credenciales básicas, nacionalismo, integridad territorial, soberanía e igualdad legal, fueron plenamente reconocidas.
I. Soberanía del Estado nación:
La soberanía llegó a ser considerada como el sello distintivo del estado-nación. El concepto de soberanía implicaba soberanía interna y externa. Internamente, el estado tenía el derecho de ordenar el comportamiento de todos sus ciudadanos y sus asociaciones en todos los aspectos. Externamente, la soberanía implicaba el derecho del Estado a representar su papel deseado en las relaciones internacionales sobre la base de sus políticas deseadas.
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El derecho a asegurar los objetivos de interés nacional mediante el uso del poder nacional fue reconocido como el poder supremo del Estado-nación. El derecho de cada nación a usar la guerra como instrumento de su política llegó a definirse como el derecho soberano de cada nación a proteger y asegurar su soberanía.
El derecho internacional fue aceptado como la ley entre los estados y no sobre los estados. Tenía su base en el consentimiento común de los estados-nación. De hecho, el derecho internacional reconoció la soberanía, la integridad territorial y la igualdad legal de todos los estados nacionales. Las relaciones internacionales llegaron a ser reconocidas como relaciones entre estados-nación soberanos.
II El nacionalismo como filosofía del estado nación:
El estado-nación se consideraba fortificado con la filosofía del nacionalismo. De hecho, el surgimiento del estado-nación fue acompañado por el surgimiento del nacionalismo, que a su vez fortaleció al estado-nación. El nacionalismo creció constantemente para abogar por una identificación del individuo con el estado. El proceso de socialización política del individuo inculcó el valor de que cada persona era ciudadano del estado por nacimiento.
Que como ciudadano se derivan todos los derechos y beneficios del estado y que como ciudadano uno está obligado a obedecer y defender al estado. Se aceptó que el estado brinda innumerables servicios a sus ciudadanos a cambio de obedecer sus leyes. La fe resultante del individuo en su estado y su amor por él dieron lugar a un fuerte nacionalismo.
Por un lado, el nacionalismo produjo varios conflictos y, por otro lado, condujo al nacimiento de fuertes movimientos entre las personas dependientes para obtener la independencia del imperialismo y el colonialismo. En Asia y África, la gente comenzó a oponerse fuertemente al imperialismo y al colonialismo para asegurar estados soberanos. Estaban fuertemente motivados por el deseo de establecer sus propios Estados-nación soberanos.
El surgimiento del nacionalismo también estuvo acompañado por la aparición de un nacionalismo agresivo en las relaciones internacionales. Este desarrollo actuó como una gran razón para el estallido de las guerras entre las naciones. Las dos guerras mundiales se produjeron principalmente debido al aumento del nacionalismo intenso, agresivo y militante de algunos estados, en particular de sus dictadores.
“Dondequiera que el estado-nación fuera una realidad, el nacionalismo reforzó y reforzó al estado; cuando seguía siendo una aspiración, el nacionalismo ponía en peligro a los estados multinacionales existentes ”. Como tal, el nacionalismo se convirtió en un elemento clave en el surgimiento y funcionamiento del sistema de estado-nación en las relaciones internacionales.
III . Integridad territorial o impermeabilidad territorial del estado nación:
El estado-nación llegó a conceptualizarse como una entidad territorial. La protección de las personas que viven dentro de sus límites se convirtió en su principal responsabilidad.
La territorialidad se hizo responsable de hacer que los estados-nación:
(1) Unidades defendibles, y
(2) Áreas internamente pacificadas. Además, la territorialidad le dio más fuerza a los conceptos de Soberanía y Nacionalismo al igual que estos le dieron fuerza. La preservación de la unidad territorial y la integridad del estado se convirtió en una parte valiosa del nacionalismo y del derecho soberano del Estado-nación.
IV. Igualdad legal / Igualdad soberana de todos los Estados-nación:
Finalmente, los estados-nación del mundo llegaron a ser reconocidos como estados soberanos iguales, independientemente de su tamaño, población, capacidad militar, recursos económicos, etc. El derecho internacional reconoció a todos los estados como entidades soberanas iguales con un estatus legal y derechos iguales.
Los estados-nación con estas cuatro características llegaron a ser actores clave en las relaciones internacionales. Estos funcionaron como actores en el entorno internacional y el sistema internacional llegó a ser un sistema de estado-nación, es decir, un sistema de relaciones e interacciones entre los estados-nación que actúan a través de sus respectivos gobiernos, estadistas y diplomáticos. Como actores internacionales, los Estados-nación condujeron sus relaciones en tiempos de guerra y paz.