En realidad, no fue así como funcionó en los primeros días (días muy tempranos, ya que fue cambiado por la 12a Enmienda en 1803).
Originalmente, hubo un solo voto electoral, con el ganador convirtiéndose en presidente y el vicepresidente de segundo lugar, PERO cada elector tenía dos votos. Si ese sistema todavía estuviera en funcionamiento en 2016, todo lo que tendría que suceder es que cada elector republicano emita un voto por Trump, y que todos menos uno emitan un voto por Pence.
Por supuesto, ese sistema no está exento de travesuras extrañas. Por ejemplo, supongamos que los electores demócratas, sabiendo que estaba en las cartas, habían emitido dos de SUS votos por Pence. Tendrían el poder de cambiar el boleto republicano.
- ¿Cuántos votos de delegados se necesitan para que el candidato presidencial anuncie a su compañero de fórmula?
- ¿Le gustó a Donald J. Trump antes de su campaña presidencial 2015-2016?
- ¿Por qué la gente, específicamente en los Estados Unidos, no vota?
- ¿Por qué las elecciones se llaman elecciones generales?
- ¿Qué nos dice la elección del tonto incompetente sobre las personas que votaron por él?
Entonces … para evitar travesuras extrañas, el sistema actual es mejor.
También vale la pena señalar:
– En el mundo real, los electores demostraron ser incapaces de emitir sus votos estratégicamente, y en 1796 y 1800 lo arruinaron de varias maneras. Hoy en día, con las llamadas telefónicas inmediatas que reemplazan los largos paseos a caballo como un medio de comunicación, probablemente habría una mejor coordinación.
– La * razón * para el sistema de dos votos para cada elector en realidad no era permitir que una de las partes controlara ambas oficinas. Querían que hubiera votos adicionales flotando con la esperanza de que fuera menos probable que nadie obtuviera la mayoría. Obviamente, en un sistema bipartito, todo el cálculo es completamente diferente.