¿Cuáles son algunas buenas lecturas sobre el choque entre la voluntad política y la protección de los derechos humanos?

Gracias por A2A

Si leo el temperamento de nuestra gente correctamente, ahora nos damos cuenta como nunca antes nos habíamos dado cuenta de nuestra interdependencia mutua; que no solo podemos tomar, sino que también debemos dar; que si queremos avanzar, debemos movernos como un ejército entrenado y leal dispuesto a sacrificarnos por el bien de una disciplina común, porque sin dicha disciplina no se avanza, no se hace efectivo el liderazgo. Estamos, lo sé, listos y dispuestos a someter nuestras vidas y propiedades a tal disciplina, porque hace posible un liderazgo que apunta a un bien mayor. Propongo ofrecer esto, prometiendo que los propósitos más grandes nos obligarán a todos como una obligación sagrada con una unidad de deber hasta ahora evocada solo en tiempos de luchas armadas.

Con esta promesa tomada, asumo sin dudar el liderazgo de este gran ejército de nuestro pueblo dedicado a un ataque disciplinado a nuestros problemas comunes.

Franklin Roosevelt, primer discurso inaugural

La mayoría de las veces miraría a la ONU. Su “Agenda 2030” es sospechosamente optimista y tiene un plazo establecido muy extraño. Sin mencionar el hecho de que legaliza el uso de las fuerzas militares de la ONU para perpetuar su “objetivo”. A sus reuniones también asisten algunos de los empresarios corporativos más poderosos del mundo. ¿Por qué un grupo de empresas y políticos que con frecuencia violan los derechos humanos se reúnen y, de repente, dicen que está mal e intentan terminarlo en algún año específico al azar? Creo que este es un ejemplo importante de cómo la voluntad política podría poner el poder sobre los gobiernos, en unas pocas manos, y por lo tanto, tiene un potencial abrumador para infringir la protección de los derechos humanos.